A principios de año siempre hacemos balance, y nos planteamos qué queremos mejorar para el año que empieza. Son días de hacer listas de buenos propósitos.
Pero seamos realistas, ya no recuerdas cual fue la lista del año pasado, ni siquiera si alcanzaste alguno de tus buenos propósitos.
A mi me encantan las listas. Yo planifico todo con listas de tareas pendientes, pero nunca hago listas de propósitos para el año siguiente. Creo que a veces confundimos listas de propósitos con deseos. Y no es para nada lo mismo.
En mi opinión cuando pides un deseo, pides que algo ocurra como por arte de magia, porque es algo difícil, lejano y donde tú no puedes intervenir. Pedir un deseo es dejar en manos del azar y esto no suele funcionar.
En lo que la salud se refiere, pedir deseos carece de sentido. Debemos cambiar el enfoque cuando hablamos de salud, ya que pensar que no podemos hacer nada por tener mejor salud, y que si ocurre la enfermedad es porque he tenido mala suerte, es erróneo.
Podemos mejorar muchísimo nuestra salud, mejorando pequeñas cosas de nuestra vida diaria. Por eso, pedir deseos para el año nuevo, no tiene sentido. Es mejor, proponerse cambios concretos que van a afectar mucho a nuestros vida.
Por ejemplo, creo que en lugar de pedir “perder peso”, es mejor plantearse dos o tres propósitos, en los que intrínsecamente derive la perdida de peso. Por ejemplo “comprar menos comida procesada”, “caminar 45 minutos diarios” y “ir una vez a la semana al mercado local a hacer la compra”.
Salud sexual
Es frecuente pedir “deseos” entorno a una mejor vida sexual. Encontrar pareja, tener más y mejor sexo, estar más satisfecha sexualmente, etc. Esta lista de buenos deseos está genial. Tener la sexualidad como algo importante en nuestras vidas es fundamental para darle la importancia que merece.
Pero estas cosas no van a ocurrir solas. Tener una mejor salud sexual implica una serie de factores relacionados no sólo con el cuerpo y los genitales, sino también con evitar embarazos no deseados, evitar enfermedades de transmisión sexual, pero también disfrutar más de mis relaciones sexuales. Para ello necesitamos acciones concretas que van a hacer que nuestra vida sexual sea mejor.
Si uno de los propósitos de este año es para ti tener una vida sexual plena, toma nota de estas acciones concretas que llevarán consigo una mejora de tu vida sexual. ¿Cuáles vas a elegir?
1. Autoconocimiento
No podemos relacionarnos bien con aquello que no conocemos. Aquello de desconocemos nos hace sentir inseguras, con miedos y alerta. Por tanto reconocer nuestro cuerpo desde una mirada amiga, una mirada que acepta y que venera es la mejor manera de empezar.
Explora tu cuerpo, cada centímetro para reconocer aquellas zonas que nunca antes te habías parado a mirar. Exponte al espejo y cambia la más crítica de las miradas (la tuya) por una mirada de amor. Empodera tu sexualidad, con autoconocimiento.
2. Me lo merezco
Tomarte la sexualidad con calma, como algo que te mereces. Como algo que es bueno para ti. Esto hará que le des importancia y que puedas darte cuenta de aquellas cosas que te aportan y aquellas cosas, en cambio que son un freno.
3. Pensar en sexo
Nunca pensamos en sexo. No tenemos tiempo, tenemos mil cosas que hacer y pensar, pero además nunca nos han enseñado a pensar en sexo.
Fantasear, pensar en sexo es el motor del deseo. Si te tomas unos minutos al día para pensar en algo erótico, algo que te estimule, verás como poco a poco este espacio se va ocupando, y esto mejor el deseo sexual.
4. Mejor comunicación
Desde luego, para que una relación sexual en pareja funcione a la perfección, hay que ponerle una buena dosis de comunicación. Hablar de aquello que nos gusta o de lo que no nos gusta, es fundamental.
Hablar con nuestra pareja de nuestras expectativas, de aquello que nos complace o aquello que nos supone un reto, es imprescindible para que las relaciones funcionen.
5. Mejor salud, mejor sexo
La percepción de salud es una de las cosas que más influye en la sexualidad. Tener mejor salud es sinónimo de mayor calidad de vida, mejor sexo y durante más tiempo. Y a su vez, cuando mejor sexo, mayor salud.
Así que no dudes en tomar acciones para aumentar tu salud como hacer ejercicio físico, comer poco procesado, más verduras y frutas y poca carne roja, dormir bien, y mantener el estrés a raya.
6. Salud genital
Aunque ya sabemos, o deberíamos saber, que la sexualidad se expresa con todo el cuerpo, lo genital es importante. Tener unos genitales que responden bien a la excitación, al orgasmo y donde no haya cabida para el dolor, es fundamental.
Así que hidrata bien tu vulva y la vagina, no le des una higiene excesiva, mantén en forma tu suelo pélvico y si hay dolor busca un profesional que te ayude. El dolor no es normal, y es una de las consultas que más atiendo. Por último, lo que no se usa se atrofia, así que dale buen uso a tus genitales, toca, juega, y riega de orgasmos tu vida y tus genitales.
Estos 6 tips son mi regalo de reyes de vosotras y, espero que este 2020 tenga una vida sexual saludable y plena. Y, ¿por qué no? Que tú sigas transmitiendo este mensaje a las mujeres de tu entorno. En 2020 y todos los años que quedan por venir ¡Quiérete mucho y bien!