La perimenopausia significa “alrededor de la menopausia” y se refiere al tiempo a lo largo de cómo el cuerpo produce la natural transición a la menopausia y marca el final de los años reproductivos. También lleva por nombre la transición menopáusica y los síntomas de la perimenopausia son muy similares.
La perimenopausia puede llegar a distintas edades. En definitiva es un periodo más o menos largo y variable de mujer a mujer. Que empieza con el fin de la reserva ovárica y finaliza con la ultima menstruación. Podemos empezar a notar cambios debidos al descenso de los estrógenos a partir de los 45 años o más, algunas mujeres lo pueden hacer incluso antes. Cuando la ultima menstruación aparece antes de los 40 años, lo denominamos menopausia precoz.
Los niveles de estrógeno, la hormona femenina principal, puede dar altibajos durante la perimenopausia, pero la tendencia general es a ir disminuyendo. Los ciclos menstruales se pueden extender o bien acortar, y también puede haber ciclos menstruales, en el que los ovarios no liberan un óvulo. También pueden aparecer sangrados abundantes como consecuencia de estos ciclos que son anovulatorios, y por tanto dan un déficit de progesterona. Pueden aparecer síntomas relacionados con lo bajos niveles de estrógenos, como sofocos, insomnio y sequedad vaginal. Existen tratamientos para ayudar a aliviar estos síntomas de la perimenopausia que se recetan si estos síntomas son muy acusados y siempre por tu médico. Cuando has pasado por doce meses consecutivos sin un periodo menstrual, oficialmente se ha llegado oficialmente a la menopausia.
Síntomas de la perimenopausia
Durante toda la transición a la menopausia se producen en el cuerpo ciertos cambios sutiles y también otros no tan sutiles. Lo mejor es estar informada, ya que estos cambios deben verse como algo propio de una fase normal en la vida de una mujer. Te explico algunos de estos síntomas a continuación:
1. Periodos menstruales irregulares
Uno de los síntomas más frecuentes de la perimenopausia, son los ciclos irregulares. Pueden ser más largos o más cortos, intercalando menstruaciones más abundantes de lo habitual. Sangrados que duran más de 7 días y con una cantidad mayor de lo normal. Esto es debido a que la reserva ovárica está disminuyendo y hay ciclos que son anovulatorios. Si no se ovula, no hay cuerpo lúteo, y sin él, hay un déficit de progesterona que hace que la menstruación sea más larga y abundante. También puede dar ciclos cortos.
2. Sofocos e inconvenientes para dormir
Los sofocos son comunes a lo largo de la perimenopausia. Su intensidad, duración y frecuencia acostumbran a variar. Los inconvenientes para dormir habitualmente se deben a los sofocos o bien las sudoraciones nocturnas, pero a veces el sueño se vuelve imposible, aun sin ellos.
3. Cambios de humor
A lo largo de la perimenopausia puedes experimentar cambios en el estado anímico, irritabilidad o mayor riesgo de depresión. La causa de estos síntomas de la perimenopausia podría radicar en las alteraciones asociadas con los sofocos.
4. Sequedad vaginal y molestias urinarias
Cuando los niveles de estrógenos se reducen, los tejidos vaginales pueden perder lubricación y elasticidad, lo que hace que las relaciones íntimas resulten dolorosas. El bajo nivel de estrógenos además puede hacerte más débil a las infecciones vaginales. La pérdida de tono tisular (de los tejidos) puede contribuir también a la incontinencia urinaria.
5. Reducción de la fertilidad
Conforme la ovulación se vuelve irregular, reduce tu capacidad para concebir. En esto recae precisamente la perimenopausia, es decir el fin progresivo de la etapa fértil de la mujer. No obstante, en tanto y cuando tengas periodos menstruales, aún es posible concebir. Si deseas evitar un embarazo, emplea métodos anticonceptivos hasta el momento en que no hayas menstruado durante 12 meses.
6. Cambios en el deseo sexual
A lo largo de la perimenopausia, el impulso y el deseo sexual pueden cambiar. No obstante, si tu vida sexual había sido satisfactoria antes de la menopausia, lo más probable es que siga siéndolo durante y después de la perimenopausia. Es uno de los síntomas de la perimenopausia que más preocupan a las mujeres.
7. Pérdida ósea
Con la reducción de los niveles de estrógenos, empiezas a perder hueso con mayor velocidad de la que lo sustituyes, lo que aumenta el peligro de sufrir osteoporosis (una enfermedad que hace que los huesos se tornen frágiles).
8. Cambios en los niveles de colesterol
Uno de los síntomas de la perimenopauisa es que la aminoración de los niveles de estrógenos puede producir cambios desfavorables en los niveles de colesterol en sangre. Uno de estos cambios puede ser el incremento del colesterol en lipoproteínas de baja densidad (LDL, el colesterol «malo»), que contribuye a acrecentar el peligro de desarrollar una enfermedad del corazón. Al mismo tiempo, el colesterol en las lipoproteínas de alta densidad (HDL, colesterol «bueno») reduce en muchas mujeres conforme envejecen, lo que asimismo aumenta el riesgo de sufrir una enfermedad del corazón.
En qué momento consultar con el médico
Ciertas mujeres procuran atención médica para los síntomas de la perimenopausia. No obstante, otras admiten los cambios o, simplemente, no tienen síntomas que sean suficientemente intensos para requerir atención. Puesto que los síntomas pueden ser sutiles y aparecen en forma gradual, probablemente no te des cuenta al comienzo que todos están conectados con lo mismo: el aumento y la minoración de los niveles de estrógeno y progesterona, otra hormona femenina clave.
Si tienes síntomas de la perimenopausia que interfieren con tu vida o bienestar (como sofocos, cambios de humor o cambios en la vida sexual) que te preocupan, consulta con tu médico.
